14 sep. Ejecutores de la obra del nuevo hotel Meliá Internacional anunciaron la posibilidad de concluir los trabajos en diciembre, con seis meses de antelación a lo previsto inicialmente. Según la arquitecta Aimé Álvarez Abat, directora de la unidad inversionista de la Empresa Inmobiliaria del Turismo, actualmente se trabaja en los sistemas de acabado y la decoración, y el buen ritmo de la labor es augurio de que cumplirán con el adelanto.
Inicialmente se pretendía entregar las 946 habitaciones del novedoso hotel en el mes de junio del año 2019; pero gracias al avance y la organización en todas las tareas es posible, con el tiempo justo, ponerlo en explotación a finales de este 2018, aseguró la experta.
El Meliá Internacional de Varadero, ubicado en la mejor zona de la franja de playa de la Península y a menos de 10 kilómetros del centro de la ciudad balneario, es propiedad del Grupo Hotelero Gran Caribe. Tendrá categoría cinco estrellas y será operado, bajo el régimen Todo Incluido, por la empresa española Meliá Hotels International Cuba.
Entre sus facilidades destaca el espacio The Level, que ofrecerá habitaciones de alto estándar y servicios personalizados, tanto a familias como a clientes de la modalidad Solo Adultos.
Se distinguirá de la mayoría de las instalaciones hoteleras de Varadero, por contar con un Centro de Convenciones con capacidad para 500 personas en formato de teatro, y 300 en formato de banquete, 13 restaurantes, entre especializados y bufet, zona de spa con piscina de corte infinito (produce un efecto visual o ilusión óptica de que el agua se extiende hasta el horizonte, o desaparece) y seis piscinas para el resto de los clientes del hotel.
Álvarez Abat explicó que el proyecto aspira a la certificación de construcción sostenible que otorga la fundación británica Breeam, líder mundial, con el expediente completo y que contempla 10 indicadores como agua, energía, recursos materiales, gestión, ventilación de los locales, y otras de organización de obra, que de obtenerla se convertirían en los primeros del país.
“Estamos trabajando muy fuerte para empezar en diciembre la explotación del hotel, se realizan las pruebas correspondientes, existen muchas habitaciones con un nivel alto de amueblamiento y terminación, esta es una maquinaria donde se mueven recursos y sistemas que van compatibilizando para hacerlos funcionar por primera vez”, dijo la arquitecta.
El Meliá Internacional, que reemplaza a la edificación original –demolida para proteger las dunas de la playa- contará con obras patrimoniales recuperadas de la otrora antológica instalación inaugurada en el año 1950 e insertadas en el nuevo diseño, y al decir de Aimé, por su arquitectura y el criterio general, “impresiona porque parece que lo estás volviendo a ver, solo que mucho más grande”.