19 oct. Cada año, una buena parte de los visitantes que arriban a la Mayor de las Antillas destina jornadas de su recorrido a visitar Santiago de Cuba, segunda ciudad en importancia de la nación.
Estratégicamente situada en el extremo oriental de la isla, teniendo a su frente el mar Caribe y a sus espaldas las montañas de la Sierra Maestra, la ciudad ofrece a todos la calidez de su clima, la hospitalidad de sus habitantes y su singular pasado de rebeldía y tradiciones.
Entre los numerosos atractivos que privilegian a la también llamada Capital del Caribe, recomendamos especialmente la visita a cuatro lugares que son parte indisoluble en la historia de la ciudad.
1-Castillo del Morro o de San Pedro de la Roca
El legendario Castillo se encuentra entre los más pintorescos sitios de la caribeña Santiago. Sus orígenes se remontan al proceso de conquista y colonización española en Cuba, durante la segunda década del siglo XVI, cuando se comienza a plantear la necesidad de construir fortalezas militares.
Mucha historia encierra el Castillo del Morro, que a lo largo de más de 370 años, se ha reconocido por ser el ejemplo más vasto y completo de la ingeniería renacentista en el Caribe. En julio de 1988, se le declaró Patrimonio de la Humanidad.
En sus instalaciones funciona un museo cuyas salas recogen los principales acontecimientos vinculados con la batalla naval de Santiago de Cuba, episodio de la guerra hispano-cubano-americana en 1898, así como también fotografías vinculadas con los sucesos del Maine, los jefes militares españoles y norteamericanos implicados y los planos de las defensas costeras y baterías originales.
Todo el complejo es de notable atracción para turistas nacionales y extranjeros que en considerable número acuden al lugar. Cada día, se efectúa en el Castillo la tradicional ceremonia Con la Puesta del Sol, que consta de tres momentos: la guardia de honor a la bandera, el disparo del cañón y un grito de ¡Cuba Libre!
2-Cementerio de Santa Ifigenia
La afamada necrópoli donde reposan los restos del Héroe Nacional de Cuba José Martí, y del líder de la Revolución Fidel Castro fue fundada en febrero de 1868.
Llama la atención la monumentalidad y belleza de los grandes panteones, construidos en granito, mármol y otros valiosos materiales.
Uno de los sitios más visitados es el Mausoleo de 24 metros de altura que guarda las cenizas de Martí, sobre un puñado de tierra de cada país de América Latina, y donde de manera perpetua cae un rayo de sol sobre su tumba. Fue inaugurado el 30 de junio de 1951. No le va en saga el sepulcro de Fidel Castro, que contrasta por su sencillez cargada de significados.
En Santa Ifigenia, sobresalen igualmente las tumbas de dos héroes de la ndependencia: la del "Padre de la Patria", Carlos Manuel de Céspedes, iniciador de la Guerra de los Diez Años (1868-1878) y el "Titán de Bronce" Antonio Maceo, figura clave en la "Guerra Necesaria" (1895-1898).
El cementerio de Santa Ifigenia fue declarado Monumento Nacional el 7 de febrero de 1937 y ratificado como tal el 20 de mayo de 1979.
3-Ciudad Escolar “26 de Julio” antiguo Cuartel Moncada
Corría el año 1953 y el Moncada era la segunda fortaleza militar del país, ocupada por unos mil hombres. En julio de ese año, un grupo de jóvenes dirigidos por Fidel Castro asaltaron el cuartel, como primer paso para derrocar al dictador Fulgencio Batista. Este acto, aunque resultó fallido, fue el comienzo de la lucha que acabaría el 1 de enero de 1959 con el triunfo de la Revolución cubana.
Sin embargo, la historia del reducto se remonta al año 1859, cuando comenzó su construcción con el objetivo de albergar la cárcel de la ciudad y también a algunas tropas. Desde entonces desempeñó un importante papel en la defensa de la ciudad, y albergó a presos famosos entre los que destaca el general mambí Guillermón Moncada, del cual tomó el nombre.
Otros acontecimientos relevantes como la insurrección de La Chambelona en 1917, y el alzamiento de los Independientes de Color en 1912, implicaron al cuartel, desde donde se apoyaba o reprimía según la conveniencia de los políticos dominantes.
Hoy el Moncada, convertido en centro escolar, posee la mayor matrícula de la provincia oriental con más de 1.600 alumnos. Dentro de sus muros se ha ubicado, en la Posta Nº 3 -lugar donde se produjo el ataque el 26 de julio de 1953- el Museo de Historia 26 de Julio.
En 1974 se reconstruyeron las murallas del cuartel al ser declarado Monumento Nacional de Cuba.
4-Plaza de la Revolución "Antonio Maceo"
Considerada la obra monumental más relevante del siglo XX ejecutada en la ciudad, se ubica a la entrada de la misma y en ella se erige la estatua más alta del país, que representa al héroe de las Guerras de Independencia y se eleva a 16 metros de altura.
El conjunto se complementa con 23 machetes que se alzan figurando la indocilidad del pueblo ante cualquier dominación foránea.
La Plaza de la Revolución cuenta también con el recinto de la Llama Eterna en memoria de los mártires, una tribuna en la que pueden reunirse 2 000 personas; el Salón de Protocolo, con su vistoso vitral, y una sala de Exposición Holográfica, en la que pueden apreciarse objetos personales del General Antonio Maceo junto a mapas, documentos y fotos.
Desde su inauguración el 14 de octubre de 1991, este lugar ha sido escenario de desfiles populares, presentaciones de artistas y otros relevantes acontecimientos políticos, sociales y culturales.
En Santiago de Cuba, donde prácticamente cada esquina cuenta al visitante una historia, es muy fácil encontrar –y disfrutar- de otros lugares igualmente interesantes. Los cuatro que describimos son, simplemente, el punto de partida.