Declaran habilitada la terminal de cruceros de La Habana

Declaran habilitada la terminal de cruceros de La Habana

29 nov. En La Habana, la terminal de cruceros “Sierra Maestra”, con sus muelles Norte y Sur ,quedó habilitada para nuevas operaciones, según consta en la Resolución 270/2021 del Ministerio de Transporte, publicada en la Gaceta Oficial Ordinaria No. 128 de este 10 de noviembre. La instalación se integra así al proceso de recuperación de los viajes internacionales a Cuba.

Operada por la Sociedad Mercantil Cubana Aries S.A., la terminal desarrollará los servicios de atraque a embarcaciones cuando tenga capacidades ociosas en la programación de cruceros y transbordadores; manipulación del equipaje no acompañado; pase a muelle de vehículos automotores; izaje y manipulación de mercancías; arrendamiento de espacios cerrados o abiertos y arrendamiento de almacenes en tránsito aduanal.

Por esta vía han arribado a la Mayor de las Antillas numerosos cruceristas de países como Reino Unido, Alemania y Estados Unidos. La situación epidemiológica internacional y las disposiciones del gobierno de Estados Unidos influyeron desfavorablemente en las llegadas de estas embarcaciones a Cuba, aunque se espera un restablecimiento paulatino durante los próximos meses.

Situada en la bahía habanera, la terminal “Sierra Maestra” ofrece acceso pleno al Centro Histórico de la capital cubana. El edificio central, inaugurado en 1914, es uno de los inmuebles que identifican a la rada y ha acogido a instituciones como Capitanía del Puerto, la Policía Marítima, los Médicos del Puerto, el Departamento de Inmigración y la Inspección General del Puerto. Este gran complejo, con sus tres viejos espigones: San Francisco, La Machina y Santa Clara, cuenta con grado II de protección, otorgado por la Comisión Nacional de Monumentos de Cuba.

Precisamente anexo a la terminal, avanza la ejecución del hotel Real Aduana, que contará con 55 habitaciones y funcionará con categoría 5 estrellas bajo la gestión de Hoteles Habaguanex. En su ejecución se aprovechan los valores del inmueble original, realzando el ambiente de época que constituye uno de los mayores atractivos del Centro Histórico de La Habana.