12 jul. Quienes visitan el complejo turístico Las Terrazas, de la Sierra del Rosario, en el extremo occidental de Cuba, encuentran un conjunto de interesantes opciones recreativas y la posibilidad de conocer importantes páginas del legado histórico- cultural del lugar.
En esta serranía, tras el Triunfo de la Revolución se acometió un ambicioso programa de rehabilitación forestal mediante la construcción de terrazas, de ahí el nombre de la zona. En apenas ocho años de labor se sembraron siete millones de árboles, se construyeron 20 kilómetros de carreteras y la comunidad habitacional Las Terrazas, en armonía con el entorno que la rodea, todo lo cual dio lugar a que en 1985 la región fuera declarada Reserva de la Biosfera por la Unesco, junto a otras áreas de la Sierra del Rosario.
En la década de los noventa del siglo pasado se edificaron y pusieron en explotación el hotel Moka y otras instalaciones que propiciaron el desarrollo turístico de la comunidad. Mientras unos habitantes proseguían enfrascados en el cultivo de plantas y flores, otros se dedicaron a cultivar manifestaciones y expresiones artísticas autóctonas, entre ellos Fernando Borrego Linares, quien en breve tiempo conquistó el público con su música y canciones.
“Polo Montañez”, como se hizo conocer artísticamente por su apodo y procedencia, o “el Guajiro Natural”, como se autodenominó en una de sus famosas composiciones, pasó a la posteridad por sus aportes a la música tradicional cubana. Tras su fallecimiento en el año 2002, su casa pasó a formar parte del complejo y hoy es un museo de gran interés para visitantes nacionales y extranjeros.
En Las Terrazas, el pasado coexiste junto al presente, gracias a la conservación de numerosas ruinas de antiguas haciendas cafetaleras del siglo XIX y sitios de las luchas independentistas. Conocer las virtudes de este hermoso paraje, y disfrutar de sus bondades son objetivos fundamentales de las excursiones que se organizan por las agencias de viajes con salidas desde varios puntos de la geografía cubana, en dependencia de las condiciones epidemiológicas y tomando estrictas medidas de seguridad sanitaria.
Estos recorridos incluyen degustación de cocteles típicos en el Rancho Curujey, paseos por las instalaciones de la comunidad (con el servicio de un guía local), el ecomuseo, la casa club, visita al bazar de artesanías locales, talleres artísticos, entrada a la casa museo de Polo Montañez, y hasta realizar un paseo aéreo de 1 600 metros en el Canopy, en el caso de los más arriesgados.
No faltan en las jornadas el almuerzo criollo en el Ranchón San Juan y el baño en las aguas del río de igual nombre, las mismas en que solía hacerlo el Guajiro Natural y que ahora imitan miles de sus admiradores.
Vinculadas a este interesante proyecto, se han conformado otras excursiones que toman la comunidad como punto de partida. Así, quienes se alojan en las Terrazas pueden trasladarse también a sitios cercanos como Soroa, Viñales y Cayo Levisa, todos paisajes excepcionales que confirman a la región Occidental de Cuba como poseedora de altos valores para el ecoturismo.
Las Terrazas es considerada el primer Eco-Museo de Cuba, referencia nacional e internacional para otras zonas de desarrollo con características similares. Esta región también ostenta el Premio de Conservación otorgado por la Unesco.
El 14 de Julio de 2024 a las 9:52 Lisette comentó:
Me gusta mucho el articulo sobre Las Terrazas. Que lugar muy lindo. Bravo a Cuba para proteger sitios natural; proteger la fauna/flora. Visite a Cuba muchas veces y puedo decir que es un pais muy autentico y maravilloso.