5 jun. El estilo musical conocido como "punto cubano" fue declarado oficialmente Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en una ceremonia efectuada en la sede de la Organización de la Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en París. El secretario de la Convención de Patrimonio Cultural Inmaterial, Tim Curtis, hizo entrega del título a la presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural de la nación caribeña, Gladys Collazo, con la presencia en el acto del destacado intelectual Miguel Barnet, presidente de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
El periodista, escritor y vicepresidente de la UNEAC, Pedro de la Oz, ofreció una amplia disertación acerca de los rasgos que distinguen al punto, ilustró su arraigo popular incluso en las generaciones más jóvenes, y subrayó su vitalidad como manifestación representativa de los cubanos.
Asimismo, recordó que junto al punto, la rumba también forma parte de la lista de Patrimonio Inmaterial, “un mérito que se agradece y compromete por cuanto representa un reconocimiento mundial, pero se trata de un compromiso que debe ser asumido a diario y, ante todo, entre nosotros mismos”.
De acuerdo con De la Oz, “primero fue la rumba (en el año 2016) ahora el punto, mañana tendrá que ser el son, tres complejos, más que géneros, de la cultura musical cubana que nos distinguen como nación”.
Por su parte, Barnet brindó una conferencia sobre la rumba, la cual asoció con la libertad y la emancipación.
Ante un amplio público presente, procedente de numerosos países, el intelectual sostuvo que “la rumba está en el alma de los cubanos”, y enfatizó su vasta proliferación en todo el país, en el cual existen innumerables grupos musicales y danzarios dedicados a cultivarla.
El presidente de la UNEAC afirmó que “la rumba es inteligente porque asume una segunda naturaleza al cumplir una función social” y porque “rompe barreras suburbanas y religiosas para instalarse en las urbes capitalinas”.
El punto cubano —o punto guajiro— es una expresión poética y musical de los campesinos de la isla, consistente en una tonada o melodía acompañada por la voz de una persona que canta composiciones poéticas en décimas, improvisada o aprendida. Fue incluido el pasado 6 de diciembre en la lista representativa del Comité Intergubernamental de salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, según la Unesco.