12 ago. La ciudad de Matanzas, apodada “La Atenas de Cuba” por su desarrollo cultural y literario desde mediados del siglo XIX, está rodeada por una naturaleza que le da un sello distintivo.
Fundada el 12 de octubre de 1693 por treinta familias procedentes de islas Canarias, España, tres ríos atraviesan su geografía, en la que sobresalen el imponente valle del Yumurí y la afamada cueva de Bellamar. Todos estos sitios naturales se unen a otros lugares de gran valor histórico y arquitectónico, como un verdadero regalo para los pobladores y visitantes de la urbe, situada a 100 kilómetros al este de La Habana.
-Plaza de la Vigía
Sitio de la fundación de la ciudad, constituyó la primera Plaza de Armas de la villa, y está enmarcada por importantes edificaciones como el Teatro Sauto y el Museo Palacio de Junco.
También se encuentran en ese entorno la estación de bomberos, el monumento al soldado libertador de las guerras contra la corona española, además de otros inmuebles ocupados por la Editorial Vigía, la Galería de Arte y el Departamento de Patrimonio y Monumentos.
Cerca de este lugar se levanta el parque nombrado Bonifacio Byrne, en honor a un poeta matancero cuyas obras cantaron la lucha del pueblo cubano para lograr la independencia de la metrópoli española.
-Parque de la Libertad
Sitio testigo de numerosos acontecimientos históricos, políticos y sociales. En el año 1909 adquirió gran importancia, debido a la edificación de un conjunto escultórico que incluye una estatua del Héroe Nacional José Martí y una personificación de la Libertad rompiendo sus cadenas.
Rodean el parque la Sala de Conciertos José White, donde se estrenó al público el danzón, baile nacional cubano; el Museo Farmacéutico, único de su tipo en el continente; la Biblioteca Gener y del Monte, y la sede de la Asamblea Provincial del Poder Popular (Gobernación).
-Parque René Fraga
Por la entrada a Matanzas desde la Carretera Central, recibe al viajero el parque René Fraga Moreno, de un diseño artístico semejante al escudo cubano. Dispone de terrenos deportivos en sus terrazas, donde pueden disputarse partidos de béisbol, softbol, baloncesto, tenis y voleibol, además de un área donde se celebran fiestas populares.
El sitio permite contemplar una de las vistas más hermosas y abarcadoras de Matanzas y constituye, de hecho, el balcón de la ciudad.
-Castillo de San Severino
Al hablarse de Matanzas es de obligada referencia el Castillo de San Severino, paradigma de las construcciones militares en el Caribe, y que después de 30 años de construcción fue terminado en 1734.
En la actualidad está dedicado a museo y por su significación se incluyó, en la década de los 90, en el programa de la UNESCO denominado La Ruta del Esclavo.
-Y más…
Como otros inmuebles singulares, expertos mencionan el antiguo Instituto de Segunda Enseñanza, La Catedral, el Seminario Evangélico y de Teología, la iglesia de San Pedro Apóstol, y el edificio que alberga la Estación de Ómnibus Interprovinciales.
A Matanzas la atraviesan tres ríos y, por lo tanto, se necesitan pasarelas para cruzar a sus respectivas orillas; de ahí que a la municipalidad se le nombre, además, como la Ciudad de los Puentes.
Aunque todos son importantes, los tres más relevantes mantienen perpetuados los nombres de un trío de patriotas que lucharon contra España y alcanzaron los grados de generales: Calixto García, José Lacret Morlot y Silverio Sánchez Figueras.
La ciudad de Matanzas, tanto en el pasado como en el presente y en futuro, constituye un punto insoslayable en el mapa histórico y cultural de Cuba.