La Sierra del Rosario, santuario de naturaleza cubana

La Sierra del Rosario, santuario de naturaleza cubana

26 ene. La Sierra del Rosario, declarada Reserva de la Biosfera, primera de su tipo establecida en Cuba por la UNESCO en 1985, está ubicada en la occidental provincia de Artemisa y abarca áreas de los municipios de Artemisa, Bahía Honda, Candelaria y San Cristóbal.

La forman montañas, llanuras y valles en más de 25 000 hectáreas. Las alturas oscilan entre los 100 y más de 500 metros sobre el nivel del mar. Son característicos de esta región su compleja estructura geológica y el endemismo de su flora: en su paisaje destacan los bosques tropicales siempre verdes, matorrales bajos y pinares. Quien la visite quedará atrapado por las especies de orquídeas, como la Bletia purpúrea, considerada símbolo de la zona.

En tanto, la fauna está compuesta por mamíferos, reptiles, invertebrados y anfibios, como la pequeña rana Eleuterodactilus limbatus, de solo 9 mm. Entre las aves sobresalen arrieros, el pájaro carpintero, zunzunes, tomeguines, garzas y el emblemático tocororo, que por llevar en su plumaje los colores de la bandera ostenta la condición de Ave Nacional.

Un Centro de Investigaciones Ecológicas en la zona monitorea el ecosistema y su restauración, la conservación de la agrodiversidad y lleva adelante múltiples proyectos científicos que garanticen el equilibrio medioambiental, sin renunciar al turismo como importante rubro económico.

De ahí el establecimiento de varias bases de Campismo Popular, zonas para acampar y senderos, todos insertados en la estrategia de turismo sostenible que llevan a cabo las autoridades del sector.

Son nombres emblemáticos del lugar las comunidades ecológicas Las Terrazas y Soroa. La primera agrupa varios sitios de interés: un asentamiento rural de desarrollo sostenible; ruinas de cafetales franceses del siglo XIX; los baños del río San Juan; el lago del mismo nombre donde es posible nadar y navegar en bote; un punto de canopy cuyos tendidos atraviesan todo el valle y el hotel Moka, con una estructura arquitectónica integrada totalmente a su entorno.

Por su parte, Soroa gana fama por su impresionante orquideario que alberga más de 700 especies (una buena parte endémicas) y su salto de agua de 22 metros de altura. Desde su mirador es posible disfrutar maravillosa vistas de toda la región, conocida como “El Arcoiris de Cuba”.

En la Sierra del Rosario el visitante podrá acceder sin límites a la fascinante naturaleza cubana, que es hoy uno de los mayores atractivos de la isla caribeña.