21 feb. El Museo del Tabaco, institución encargada de promover y divulgar la historia y cultura tabacalera en Cuba, celebrará el próximo lunes su aniversario 25 con variadas actividades.
Zoe Nocedo, directora del centro perteneciente a la Oficina del Historiador de La Habana, explicó a la prensa que se prevén encuentros con profesores del diplomado Panorama histórico, socioeconómico y cultural de la industria del tabaco, que se imparte a trabajadores del sector para enriquecer sus conocimientos sobre esa práctica.
Inaugurarán, asimismo, una exposición fotográfica referida a La historia del habano en la sala La Diversidad, ubicada en la calle Amargura entre Mercaderes y San Ignacio, en el capitalino municipio de La Habana Vieja.
También realizarán un acto cultural en la casa de la Obra Pía, donde resaltarán la contribución de las directoras, museólogas, veladoras y otros trabajadores al desarrollo de la emblemática institución.
Nocedo precisó que en la edición XX del Festival del Habano ofrecerán una conferencia acerca de la historia de ese importante evento, dedicado a los Puros Premium más famosos del mundo.
Respecto a los proyectos socioculturales que lidera el museo, mencionó las exposiciones, concursos infantiles y juveniles, así como intercambios con las personas de la tercera edad. Aludió a los coloquios Flores del Habano, en el que anualmente se reconocen las féminas por su profesión u oficio, y Amigas del Habano, que agrupa cubanas y extranjeras, las cuales durante casi ocho años son protagonistas y defensoras de ese arte.
Además, destacó el papel que desempeñan los lectores de tabaquería del país. Ponderó que esa práctica oral, nacida en la época de la colonia, es Patrimonio Cultural de la Nación desde el año 2012.
El Museo del Tabaco, ubicado en un inmueble que data de las primeras décadas del siglo XVIII, exhibe en sus salones y recibidores los decorados de anillas y habilitaciones, arte litográfico, pipas, ceniceros, encendedores, cigarreras, cortapuros, óleos y otros objetos.
Más de dos mil visitantes llegaron en 2017 a esta institución, que representa la historia de un producto insigne de la cultura cubana.